Videntes y Tarotistas en Albalá
Albalá así como Cáceres son territorios históricos donde abundan los profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 798 ciudadanos encontramos multitud de maestros en la habilidad del tarot y grandes excelencias de la videncia.
¿Cuanto cuesta un vidente y tarotista en Albalá?
Los costes de estos profesionales acostumbran a ser muy variados, dependiendo de la experiencia aportada y de los servicios a efectuar. Lo más habitual es pedir sus precios mediante e-mail o por teléfono. Probablemente existan tarotistas que pueden ofrecer tarot online gratis.
Además muchos de ellos ofrecen servicios para toda la zona de Extremadura.
La mayoría de ellos dan no exclusivamente lectura de tarot en persona, además admiten tarot de tipo telefónico.
La tradición del Tarot y los Arcanos en Cáceres y en concreto en Albalá
Una baraja de Tarot se compone de un total de setenta y ocho cartas, divididas en tres grupos: 22 Misterios Mayores, 40 Arcanos Menores,
dividios en 4 series de 10, los conocidos palos, y 16 honores o bien figuras, compuestas por los Caballeros, Reyes, Pajes y Reinas de los 4 palos.
Estas 3 secciones, si bien distintas, tienen una unidad de contenido puesto que es posible encontrar numerosas relaciones simbólicas entre todas y cada una de las cartas.
Entrar en contacto con el Tarot es conocer nuestro propio inconsciente, un lugar mágico y maravilloso con el que vamos a poder descubrir los mensajes o bien indicaciones que nuestra propia alma a través del inconsciente nos quiere decir.
El Tarot emplea un lenguaje simbólico, de ahí, la trascendencia en conocer todos y cada uno de los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que contenga todos y cada uno de los símbolos precisos para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos realizar la misma tarea que haría un analista de sueños, puesto que el proceso es muy similar, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, asociaciones de ideas, las analogías y correspondencias están contenidas en la arquitectura con la que está creado el juego.
Transformarse en un maestro intérprete de Tarot demanda años de estudio y práctica, pero las mismas cartas se transforman con el tiempo en el profesor verdadero, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos a través de la misma práctica.
Muchas leyendas se han contado acerca del origen del Tarot: entre las más extendidas es su pretendido origen egipcio. Idea que brotó desde Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en 1.781 explicó que había tenido un sueño en el que se encontraba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. Desde ahí brotó la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio lugar a que se idease en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento actual que no tiene correspondencia alguna con la verdadera tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot jamás ha podido ser contrastado pues ningún indicio arqueológico en Egipto recuerda ni remotamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Una historia afirma que fueron los gitanos sus creadores. Tal aseveración carece de solidez histórica, dado que es conocido que en siglo XIV existen ya varias referencias en Europa al juego de “naips” o bien cartas. Los gitanos no habían llegado todavía a Europa en dicha fecha.
Un oráculo puede definir múltiples cosas, la primera un templo o sitio sagrado en el cual los dioses se manifiestan, la segunda la contestación de los dioses a través de una sacerdotisa o de una señal física y en tercer sitio puede tratarse del soporte a través del que se esclarece una duda.