Videntes y Tarotistas en Busturia
Busturia al igual que Vizcaya son sitios históricos donde existen multitud de profesionales relacionados con el tarot y la videncia.
Entre sus más de 1746 vecinos hallamos multitud de maestros en la habilidad del tarot y grandes eminencias de la videncia.
¿Cuales son las tarifas de un tarotista y/o vidente en Busturia?
Los precios de estos profesionales suelen ser muy variados, dependiendo de la experiencia aportada y de los servicios a efectuar. Lo más cómodo es solicitar sus tarifas mediante email o por teléfono. Puede darse el caso de que existan profesionales que pueden ofrecer tarot online.
No obstante gran parte de ellos dan consulta para casi toda la zona de País Vasco.
Casi todos los tarotistas admiten no sólo interpretación de tarot presencial, tambien aceptan tarot de tipo telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Vizcaya y en concreto en Busturia
Una baraja de Tarot se forma de un total de setenta y ocho cartas, divididas en tres grupos: 22 Arcanos Mayores, 40 Arcanos Menores,
dividios en 4 series de 10, los llamados palos, y dieciseis honores o bien figuras, compuestas por los Caballeros, Reyes, Pajes y Reinas de los cuatro palos.
Estas tres secciones, si bien diferentes, tienen una unidad de contenido puesto que es posible hallar numerosas relaciones simbólicas entre todas y cada una de las cartas.
Conocer el Tarot es conocer nuestro propio inconsciente, un mundo mágico y maravilloso con el que vamos a poder descubrir los mensajes o indicaciones que nuestra alma a través del inconsciente nos quiere transmitir.
El Tarot usa un lenguaje en base a símbolos, de ahí, la relevancia en conocer todos los detalles de cada carta y la necesidad de contar con una baraja que tenga todos los símbolos necesarios para una correcta interpretación.
A través del Tarot podemos efectuar la misma labor que haría un analista de sueños, puesto que el proceso es muy similar, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, asociaciones de ideas, las analogías y correspondencias dentro de la arquitectura con la que está compuesto el juego.
Convertirse en un gran intérprete de Tarot implica años de estudio y práctica, mas las mismas cartas se convierten con el tiempo en el profesor verdadero, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos a través de exactamente la misma práctica.
Muchas historias se han escuchado acerca del origen del Tarot: una de las más conocidas es su pretendido origen egipcio. Idea que surgió a partir de Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en mil setecientos ochenta y uno explicó que había tenido un sueño en el que se encontraba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. A partir de ahí brotó la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio sitio a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento reciente que no guarda relación alguna con la verdadera tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot jamás ha podido ser contrastado pues ningún rastro arqueológico en Egipto recuerda ni remotamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Una teoría sugiere que fueron los gitanos sus inventores. Tal aseveración carece de rigurosidad histórica, puesto que es sabido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o cartas. Los gitanos no habían llegado aún a Europa en dicha data.
Un oráculo puede delimitar varias cosas, la primera un templo o bien sitio sagrado en el cual los dioses se manifiestan, la segunda la respuesta de los dioses a través de una sacerdotisa o de una señal física y en tercer lugar puede tratarse del soporte a través del cual se dilucida una duda.