Videntes y Tarotistas en Càrcer
Càrcer al igual que Valencia son territorios legendarios donde abundan los profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 2109 residentes localizamos multitud de especialistas en el arte del tarot y grandes celebridades de la videncia.
¿Cual es la tarifa de un vidente y tarotista en Càrcer?
Los costes de estos profesionales acostumbran a ser muy variados, dependiendo de la experiencia aportada y de los servicios a realizar. Lo más cómodo es pedir sus tarifas mediante e-mail o bien por teléfono. Probablemente existan profesionales que puedan darte tarot gratuito.
No obstante muchos de ellos dan consulta para casi toda la zona de Valencia.
Casi todos los tarotistas ofrecen no exclusivamente lectura de tarot en persona, además aceptan tarot telefónico.
La tradición del Tarot y los Arcanos en Valencia y en concreto en Càrcer
Una baraja de Tarot se compone de un total de setenta y ocho cartas, divididas en 3 grupos: veintidos Arcanos Mayores, cuarenta Misterios Menores,
dividios en cuatro series de 10, los conocidos palos, y dieciseis honores o figuras, compuestas por los Caballeros, Reyes, Pajes y Reinas de los cuatro palos.
Estas 3 secciones, si bien distintas, poseen una unidad de contenido pues es posible encontrar numerosas relaciones simbólicas entre todas y cada una de las cartas.
Aprender el Tarot es entrar en contacto con nuestro inconsciente, un planeta mágico y fantástico con el que vamos a poder descubrir los mensajes o bien indicaciones que nuestra alma a través del inconsciente nos desea decir.
El Tarot usa un lenguaje simbólico, de ahí, la relevancia en conocer todos y cada uno de los detalles de cada carta y la necesidad de contar con una baraja que contenga todos y cada uno de los símbolos precisos para una correcta interpretación.
A través del Tarot podemos efectuar la misma labor que haría un analista de sueños, ya que el proceso es muy similar, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, las analogías, correspondencias y asociaciones de ideas dentro de la arquitectura con la que está creado el juego.
Convertirse en un gran intérprete de Tarot exige años de estudio y práctica, mas las mismas cartas se convierten con el tiempo en el profesor verdadero, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos mediante la misma práctica.
Muchas fábulas se han contado acerca del origen del Tarot: entre las más conocidas es su pretendido origen egipcio. Idea que brotó a partir de Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en mil setecientos ochenta y uno explicó que había tenido un sueño en el que se hallaba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. Desde ahí brotó la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio sitio a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento moderno que no tiene correspondencia alguna con la auténtica tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot jamás ha podido ser comprobado pues ningún indicio arqueológico en Egipto recuerda ni remotamente siquiera la posible existencia de tal juego.
Una teoría comenta que fueron los gitanos sus fundadores. Tal historia carece de rigurosidad histórica, puesto que es conocido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o cartas. Los gitanos no habían llegado aún a Europa en tal data.
Un oráculo puede acotar varias cosas, la primera un templo o sitio sagrado en el cual los dioses se manifiestan, la segunda la respuesta de los dioses a través de una sacerdotisa o bien de una señal física y en tercer lugar puede tratarse del soporte a través del cual se dilucida una duda.