Tarotistas y Videntes en Casafranca
Casafranca así como Salamanca son territorios históricos donde existen multitud de profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 78 habitantes encontramos multitud de especialistas en la habilidad del tarot y grandes eminencias de la videncia.
¿Cual es la tarifa de un tarotista y/o vidente en Casafranca?
Los costos de estos profesionales acostumbran a ser muy variados, en dependencia de la experiencia aportada y de los servicios a realizar. Lo más habitual es solicitar sus precios mediante email o bien por teléfono. Puede darse el caso de que existan tarotistas que pueden ofrecer tarot online.
Además gran parte de ellos ofrecen consulta para toda la zona de Castilla León.
La mayoría de ellos admiten no sólo servicio de tarot en persona, tambien admiten tarot telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Salamanca y en concreto en Casafranca
Una baraja de Tarot se compone de un total de setenta y ocho cartas, divididas en tres grupos: veintidos Misterios Mayores, 40 Misterios Menores,
distribuidos en 4 series de 10, los llamados palos, y 16 honores o figuras, compuestas por los Pajes, Reinas, Reyes y Caballeros de los 4 palos.
Estas tres secciones, aunque diferentes, poseen una unidad de contenido pues es posible hallar numerosas relaciones simbólicas entre todas las cartas.
Tomar contacto con el Tarot es entrar en contacto con nuestro propio inconsciente, un mundo mágico y misterioso con el que podremos descubrir los mensajes o indicaciones que nuestra propia alma a través del inconsciente nos quiere comunicar.
El Tarot se vale de un lenguaje en base a símbolos, de ahí, la relevancia en conocer cada uno de los detalles de cada carta y la necesidad de contar con una baraja que contenga todos los símbolos necesarios para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos efectuar exactamente la misma labor que haría un analista de sueños, ya que el proceso es muy afín, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, las analogías, correspondencias y asociaciones de ideas están contenidas en la arquitectura con la que está creado el juego.
Transformarse en un gran intérprete de Tarot exige años de estudio y práctica, pero exactamente las mismas cartas se transforman con el tiempo en el maestro auténtico, ya que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos a través de la misma práctica.
Muchas leyendas se han escuchado sobre el origen del Tarot: una de las más conocidas es su pretendido origen egipcio. Idea que surgió desde Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en 1.781 explicó que había tenido un sueño en el que se hallaba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. A partir de ahí surgió la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio sitio a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento actual que no guarda relación alguna con la auténtica tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot jamás ha podido ser comprobado pues ningún indicio arqueológico en Egipto recuerda ni vagamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Una teoría afirma que fueron los gitanos sus creadores. Tal aseveración carece de rigurosidad histórica, dado que es sabido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o cartas. Los gitanos no habían llegado aún a Europa en dicha fecha.
Un oráculo puede delimitar múltiples cosas, la primera un templo o lugar sagrado en el cual los dioses se manifiestan, la segunda la contestación de los dioses por medio de una sacerdotisa o bien de una señal física y en tercer lugar puede tratarse del soporte a través del que se dilucida una duda.