Tarotistas y Videntes en Castell de Mur
Castell de Mur y toda la zona de Lleida son lugares tradicionales donde abundan los profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 173 vecinos localizamos multitud de especialistas en la práctica del tarot y grandes excelencias de la videncia.
¿Cuales son las tarifas de un vidente y tarotista en Castell de Mur?
Los precios de estos profesionales acostumbran a ser variadísimos, dependiendo de la experiencia aportada y de los servicios a efectuar. Lo más cómodo es solicitar sus precios a través de email o por teléfono. Tal vez te encuentres tarotistas que pueden ofrecer tarot gratis.
Además gran parte de ellos ofrecen servicio para toda la zona de Catalunya.
La mayoría de ellos admiten no exclusivamente lectura de tarot presencial, además aceptan tarot telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Lleida y en concreto en Castell de Mur
Una baraja de Tarot se compone de un total de 78 cartas, divididas en 3 grupos: veintidos Arcanos Mayores, 40 Arcanos Menores,
dividios en 4 series de diez, los conocidos palos, y 16 honores o bien figuras, compuestas por los Pajes, Reinas, Reyes y Caballeros de los 4 palos.
Estas tres secciones, aunque diferentes, poseen una unidad de contenido puesto que es posible localizar muchas relaciones simbólicas entre todas las cartas.
Conocer el Tarot es entrar en contacto con nuestro propio inconsciente, un mundo mágico y maravilloso con el que podremos descubrir los mensajes o indicaciones que nuestra propia alma a través del inconsciente nos quiere comunicar.
El Tarot emplea un lenguaje en base a símbolos, de ahí, la trascendencia en conocer todos y cada uno de los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que tenga todos los símbolos necesarios para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos realizar exactamente la misma labor que haría un analista de sueños, en tanto que el proceso es muy similar, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, las analogías, correspondencias y asociaciones de ideas dentro de la estructura con la que está creado el juego.
Lograr ser un gran intérprete de Tarot demanda años de estudio y práctica, pero las mismas cartas se convierten con el tiempo en el profesor auténtico, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos a través de la misma práctica.
Muchas historias se han escuchado acerca del origen del Tarot: entre las más extendidas es su pretendido origen egipcio. Idea que surgió a partir de Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en mil setecientos ochenta y uno explicó que había tenido un sueño en el que se encontraba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. A partir de ahí surgió la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio lugar a que se idease en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento actual que no guarda correspondencia alguna con la auténtica tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot jamás ha podido ser contrastado puesto que ningún indicio arqueológico en Egipto recuerda ni remotamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Una teoría comenta que fueron los gitanos sus creadores. Tal afirmación carece de rigurosidad histórica, puesto que es sabido que en siglo XIV existen ya varias referencias en Europa al juego de “naips” o cartas. Los gitanos no habían llegado todavía a Europa en dicha fecha.
Un oráculo puede acotar varias cosas, la primera un templo o bien lugar sagrado en el que los dioses se manifiestan, la segunda la respuesta de los dioses mediante una sacerdotisa o de una señal física y en tercer sitio puede tratarse del soporte a través del que se esclarece una duda.