Videntes y Tarotistas en Egüés
Egüés y toda la zona de Navarra son lugares históricos donde existen multitud de profesionales relacionados con el tarot y la videncia.
Entre sus más de 10787 residentes encontramos multitud de expertos en el arte del tarot y grandes excelencias de la videncia.
¿Cuanto cuesta un vidente y tarotista en Egüés?
Los costos de estos profesionales acostumbran a ser muy variados, dependiendo de la experiencia aportada y de los servicios a realizar. Lo más cómodo es pedir sus precios mediante e-mail o bien por teléfono. Tal vez te encuentres profesionales que pueden ofrecer tarot gratis.
Además muchos de ellos dan servicios para casi toda la zona de Navarra.
Muchos de los tarotistas dan no exclusivamente servicio de tarot de tipo presencial, además admiten tarot de tipo telefónico.
La tradición del Tarot y los Arcanos en Navarra y en concreto en Egüés
Una baraja de Tarot se forma de un total de 78 cartas, divididas en tres grupos: veintidos Arcanos Mayores, cuarenta Misterios Menores,
dividios en 4 series de 10, los conocidos palos, y 16 honores o bien figuras, compuestas por los Reyes, Pajes, Reinas y Caballeros de los cuatro palos.
Estas 3 secciones, aunque diferentes, tienen una unidad de contenido puesto que es posible encontrar numerosas relaciones simbólicas entre todas y cada una de las cartas.
Tomar contacto con el Tarot es conocer nuestro propio inconsciente, un planeta mágico y misterioso con el que podremos descubrir los mensajes o indicaciones que nuestra propia ánima a través del inconsciente nos quiere comunicar.
El Tarot se vale de un lenguaje en base a símbolos, de ahí, la trascendencia en conocer cada uno de los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que contenga todos los símbolos necesarios para una correcta interpretación.
A través del Tarot podemos efectuar exactamente la misma tarea que haría un analista de sueños, en tanto que el proceso es muy afín, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, asociaciones de ideas, las analogías y correspondencias están contenidas en la arquitectura con la que está creado el juego.
Lograr ser un buen intérprete de Tarot demanda años de estudio y práctica, pero las mismas cartas se convierten con el tiempo en el maestro auténtico, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos por medio de la misma práctica.
Muchas fábulas se han dicho sobre el origen del Tarot: entre las más conocidas es su pretendido origen egipcio. Idea que surgió a partir de Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en mil setecientos ochenta y uno explicó que había tenido un sueño en el que se hallaba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. A partir de ahí brotó la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio lugar a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento actual que no guarda correspondencia alguna con la auténtica tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot nunca ha podido ser comprobado pues ningún vestigio arqueológico en Egipto recuerda ni vagamente siquiera la posible existencia de tal juego.
Otra historia sugiere que fueron los gitanos sus inventores. Tal teoría carece de rigurosidad histórica, dado que es conocido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o cartas. Los gitanos no habían llegado aún a Europa en dicha fecha.
Un oráculo puede delimitar múltiples cosas, la primera un templo o bien sitio sagrado en el cual los dioses se manifiestan, la segunda la respuesta de los dioses por medio de una sacerdotisa o bien de una señal física y en tercer lugar puede tratarse del soporte a través del que se dilucida una duda.