Tarotistas y Videntes en Oñati
Oñati así como Guipúzcoa son sitios tradicionales donde abundan los profesionales relacionados con el tarot y la videncia.
Entre sus más de 10896 habitantes encontramos multitud de expertos en maestría del tarot y grandes excelencias de la videncia.
¿Cuales son las tarifas de un tarotista y/o vidente en Oñati?
Los costos de estos profesionales acostumbran a ser variadísimos, en dependencia de la experiencia aportada y de los servicios a realizar. Lo más habitual es solicitar sus tarifas mediante correo electrónico o por teléfono. Probablemente existan profesionales que puedan darte tarot online.
Además la mayoría de ellos ofrecen servicio para toda la zona de País Vasco.
Muchos de los tarotistas ofertan no exclusivamente servicio de tarot presencial, tambien admiten tarot de tipo telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Guipúzcoa y en concreto en Oñati
Una baraja de Tarot se compone de un total de setenta y ocho cartas, divididas en tres grupos: 22 Misterios Mayores, 40 Arcanos Menores,
dividios en cuatro series de diez, los conocidos palos, y 16 honores o figuras, compuestas por los Pajes, Reinas, Reyes y Caballeros de los cuatro palos.
Estas 3 secciones, si bien distintas, poseen una unidad de contenido pues es posible hallar muchas relaciones simbólicas entre todas y cada una de las cartas.
Entrar en contacto con el Tarot es tomar contacto con nuestro propio inconsciente, un mundo mágico y maravilloso con el que podremos descubrir los mensajes o indicaciones que nuestra propia alma a través del inconsciente nos quiere hacer llegar.
El Tarot emplea un lenguaje en base a símbolos, de ahí, la trascendencia en conocer cada uno de los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que contenga todos los símbolos precisos para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos realizar exactamente la misma labor que haría un analista de sueños, ya que el proceso es muy similar, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, asociaciones de ideas, las analogías y correspondencias están contenidas en la arquitectura con la que está compuesto el juego.
Convertirse en un gran intérprete de Tarot exige años de estudio y práctica, mas las mismas cartas se convierten con el tiempo en el profesor verdadero, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos mediante la misma práctica.
Muchas leyendas se han dicho sobre el origen del Tarot: entre las más extendidas es su pretendido origen egipcio. Idea que surgió a partir de Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en 1.781 explicó que había tenido un sueño en el que se encontraba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. A partir de ahí brotó la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio sitio a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento actual que no tiene relación alguna con la verdadera tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot nunca ha podido ser comprobado pues ningún rastro arqueológico en Egipto recuerda ni vagamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Una historia afirma que fueron los gitanos sus inventores. Tal afirmación carece de rigurosidad histórica, dado que es conocido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o cartas. Los gitanos no habían llegado aún a Europa en tal fecha.
Un oráculo puede delimitar varias cosas, la primera un templo o bien lugar sagrado en el cual los dioses se manifiestan, la segunda la contestación de los dioses por medio de una sacerdotisa o bien de una señal física y en tercer sitio puede tratarse del soporte a través del cual se esclarece una duda.