Videntes y Tarotistas en Puebla de Don Francisco
Puebla de Don Francisco al igual que Cuenca son territorios legendarios donde abundan los profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 322 habitantes localizamos multitud de maestros en el arte del tarot y grandes excelencias de la videncia.
¿Cuanto vale un tarotista y/o vidente en Puebla de Don Francisco?
Los costos de estos profesionales suelen ser muy variados, dependiendo de la experiencia aportada y de los servicios a realizar. Lo más cómodo es pedir sus precios a través de correo electrónico o bien por teléfono. Puede darse el caso de que existan profesionales que puedan darte tarot gratuito.
No obstante la mayoría de ellos dan consulta para casi toda la zona de Castilla La Mancha.
Casi todos los tarotistas admiten no exclusivamente servicio de tarot presencial, tambien aceptan tarot de tipo telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Cuenca y en concreto en Puebla de Don Francisco
Una baraja de Tarot se forma de un total de 78 cartas, divididas en 3 grupos: veintidos Arcanos Mayores, 40 Misterios Menores,
distribuidos en cuatro series de 10, los conocidos palos, y 16 honores o bien figuras, compuestas por los Reyes, Pajes, Reinas y Caballeros de los cuatro palos.
Estas tres secciones, aunque diferentes, poseen una unidad de contenido puesto que es posible localizar numerosas relaciones simbólicas entre todas las cartas.
Tomar contacto con el Tarot es conocer nuestro propio inconsciente, un planeta mágico y misterioso con el que podremos descubrir los mensajes o bien indicaciones que nuestra alma a través del inconsciente nos quiere transmitir.
El Tarot usa un lenguaje simbólico, de ahí, la trascendencia en conocer cada uno de los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que contenga todos los símbolos necesarios para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos efectuar la misma labor que haría un analista de sueños, puesto que el proceso es muy similar, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, asociaciones de ideas, las analogías y correspondencias dentro de la arquitectura con la que está compuesto el juego.
Convertirse en un gran intérprete de Tarot demanda años de estudio y práctica, pero las mismas cartas se transforman con el tiempo en el maestro verdadero, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos a través de exactamente la misma práctica.
Muchas fábulas se han escuchado acerca del origen del Tarot: entre las más conocidas es su pretendido origen egipcio. Idea que surgió desde Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en mil setecientos ochenta y uno explicó que había tenido un sueño en el que se hallaba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. A partir de ahí surgió la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio lugar a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento reciente que no guarda correspondencia alguna con la auténtica tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot jamás ha podido ser comprobado pues ningún vestigio arqueológico en Egipto recuerda ni remotamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Otra teoría dice que fueron los gitanos sus inventores. Tal teoría carece de rigor histórico, dado que es sabido que en siglo XIV existen ya varias referencias en Europa al juego de “naips” o cartas. Los gitanos no habían llegado todavía a Europa en tal fecha.
Un oráculo puede acotar múltiples cosas, la primera un templo o bien sitio sagrado en el que los dioses se manifiestan, la segunda la respuesta de los dioses por medio de una sacerdotisa o bien de una señal física y en tercer sitio puede tratarse del soporte a través del cual se dilucida una duda.