Tarotistas y Videntes en Santa Cilia
Santa Cilia y toda la zona de Huesca son lugares legendarios donde hay multitud de profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 207 residentes localizamos multitud de expertos en la práctica del tarot y grandes eminencias de la videncia.
¿Cuales son las tarifas de un tarotista y/o vidente en Santa Cilia?
Los costes de estos profesionales acostumbran a ser variadísimos, en dependencia de la experiencia aportada y de los servicios a efectuar. Lo más habitual es pedir sus tarifas a través de email o por teléfono. Tal vez te encuentres profesionales que pueden ofrecer tarot gratuito.
No obstante la mayoría de ellos ofrecen servicios para casi toda la zona de Aragón.
Muchos dan no exclusivamente servicio de tarot en persona, además admiten tarot de tipo telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Huesca y en concreto en Santa Cilia
Una baraja de Tarot se compone de un total de 78 cartas, divididas en tres grupos: veintidos Arcanos Mayores, 40 Arcanos Menores,
dividios en 4 series de 10, los llamados palos, y dieciseis honores o figuras, compuestas por los Pajes, Reinas, Reyes y Caballeros de los 4 palos.
Estas 3 secciones, si bien distintas, tienen una unidad de contenido puesto que es posible encontrar numerosas relaciones simbólicas entre todas las cartas.
Entrar en contacto con el Tarot es tomar contacto con nuestro inconsciente, un planeta mágico y misterioso con el que podremos descubrir los mensajes o indicaciones que nuestra alma a través del inconsciente nos quiere comunicar.
El Tarot emplea un lenguaje simbólico, de ahí, la trascendencia en conocer todos y cada uno de los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que tenga todos y cada uno de los símbolos precisos para una correcta interpretación.
A través del Tarot podemos efectuar la misma labor que haría un analista de sueños, puesto que el proceso es muy similar, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, las analogías, correspondencias y asociaciones de ideas están contenidas en la arquitectura con la que está compuesto el juego.
Lograr ser un maestro intérprete de Tarot implica años de estudio y práctica, pero exactamente las mismas cartas se convierten con el tiempo en el maestro verdadero, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos mediante exactamente la misma práctica.
Muchas historias se han dicho sobre el origen del Tarot: entre las más conocidas es su pretendido origen egipcio. Idea que brotó a partir de Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en mil setecientos ochenta y uno explicó que había tenido un sueño en el que se hallaba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. Desde ahí surgió la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio sitio a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento reciente que no guarda relación alguna con la verdadera tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot jamás ha podido ser contrastado pues ningún indicio arqueológico en Egipto recuerda ni vagamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Otra teoría comenta que fueron los gitanos sus creadores. Tal afirmación carece de solidez histórica, dado que es sabido que en siglo XIV existen ya varias referencias en Europa al juego de “naips” o bien cartas. Los gitanos no habían llegado todavía a Europa en tal fecha.
Un oráculo puede acotar múltiples cosas, la primera un templo o sitio sagrado en el cual los dioses se manifiestan, la segunda la contestación de los dioses por medio de una sacerdotisa o de una señal física y en tercer sitio puede tratarse del soporte a través del cual se esclarece una duda.