Tarotistas y Videntes en Valdehúncar
Valdehúncar y toda la zona de Cáceres son territorios históricos donde abundan los profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 212 habitantes hallamos multitud de maestros en el arte del tarot y grandes excelencias de la videncia.
¿Cuanto cuesta un tarotista y/o vidente en Valdehúncar?
Los costes de estos profesionales acostumbran a ser variadísimos, dependiendo de la experiencia aportada y de los servicios a efectuar. Lo más habitual es pedir sus tarifas a través de email o por teléfono. Probablemente existan tarotistas que puedan darte tarot online gratis.
No obstante muchos de ellos dan servicio para casi toda la zona de Extremadura.
La mayoría de ellos admiten no exclusivamente interpretación de tarot en persona, además aceptan tarot de tipo telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Cáceres y en concreto en Valdehúncar
Una baraja de Tarot se forma de un total de 78 cartas, divididas en tres grupos: 22 Arcanos Mayores, cuarenta Misterios Menores,
distribuidos en 4 series de diez, los conocidos palos, y dieciseis honores o bien figuras, compuestas por los Reyes, Pajes, Reinas y Caballeros de los cuatro palos.
Estas tres secciones, si bien diferentes, poseen una unidad de contenido pues es posible encontrar numerosas relaciones simbólicas entre todas y cada una de las cartas.
Conocer el Tarot es entrar en contacto con nuestro propio inconsciente, un mundo mágico y misterioso con el que podremos descubrir los mensajes o bien indicaciones que nuestra propia ánima a través del inconsciente nos desea transmitir.
El Tarot usa un lenguaje en base a símbolos, de ahí, la trascendencia en conocer todos y cada uno de los detalles de cada carta y la necesidad de contar con una baraja que tenga todos los símbolos precisos para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos realizar la misma tarea que haría un analista de sueños, en tanto que el proceso es muy afín, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, asociaciones de ideas, las analogías y correspondencias están contenidas en la arquitectura con la que está creado el juego.
Llegar a ser un buen intérprete de Tarot implica años de estudio y práctica, mas las mismas cartas se convierten con el tiempo en el profesor verdadero, ya que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos mediante la misma práctica.
Muchas fábulas se han contado acerca del origen del Tarot: una de las más conocidas es su pretendido origen egipcio. Idea que brotó desde Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en 1.781 explicó que había tenido un sueño en el que se encontraba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. A partir de ahí brotó la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio lugar a que se idease en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento moderno que no tiene correspondencia alguna con la verdadera tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot nunca ha podido ser comprobado puesto que ningún vestigio arqueológico en Egipto recuerda ni vagamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Una teoría sugiere que fueron los gitanos sus inventores. Tal aseveración carece de rigor histórico, dado que es conocido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o bien cartas. Los gitanos no habían llegado todavía a Europa en tal fecha.
Un oráculo puede acotar múltiples cosas, la primera un templo o bien sitio sagrado en el que los dioses se manifiestan, la segunda la contestación de los dioses a través de una sacerdotisa o bien de una señal física y en tercer lugar puede tratarse del soporte a través del que se dilucida una duda.