Tarotistas y Videntes en Alfántega
Alfántega y toda la zona de Huesca son territorios típicos donde hay multitud de profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 135 vecinos localizamos multitud de expertos en la práctica del tarot y grandes celebridades de la videncia.
¿Cuales son las tarifas de un tarotista y/o vidente en Alfántega?
Los costos de estos profesionales acostumbran a ser muy variados, en dependencia de la experiencia aportada y de los servicios a efectuar. Lo más cómodo es pedir sus precios a través de email o bien por teléfono. Probablemente existan profesionales que pueden ofrecer tarot online.
No obstante muchos de ellos dan servicio para toda la zona de Aragón.
Muchos de los tarotistas dan no sólo interpretación de tarot de tipo presencial, tambien aceptan tarot telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Huesca y en concreto en Alfántega
Una baraja de Tarot se forma de un total de setenta y ocho cartas, divididas en tres grupos: 22 Arcanos Mayores, 40 Arcanos Menores,
dividios en cuatro series de diez, los llamados palos, y 16 honores o bien figuras, compuestas por los Reyes, Pajes, Reinas y Caballeros de los cuatro palos.
Estas 3 secciones, aunque diferentes, tienen una unidad de contenido puesto que es posible localizar muchas relaciones simbólicas entre todas las cartas.
Conocer el Tarot es entrar en contacto con nuestro propio inconsciente, un planeta mágico y misterioso con el que vamos a poder descubrir los mensajes o indicaciones que nuestra ánima a través del inconsciente nos desea comunicar.
El Tarot usa un lenguaje simbólico, de ahí, la relevancia en conocer cada uno de los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que contenga todos y cada uno de los símbolos necesarios para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos efectuar la misma labor que haría un analista de sueños, ya que el proceso es muy afín, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, las analogías, correspondencias y asociaciones de ideas están contenidas en la arquitectura con la que está compuesto el juego.
Lograr ser un gran intérprete de Tarot implica años de estudio y práctica, mas las mismas cartas se transforman con el tiempo en el profesor auténtico, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos mediante la misma práctica.
Muchas leyendas se han escuchado acerca del origen del Tarot: una de las más conocidas es su pretendido origen egipcio. Idea que surgió desde Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en mil setecientos ochenta y uno explicó que había tenido un sueño en el que se hallaba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. A partir de ahí brotó la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio sitio a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento reciente que no guarda relación alguna con la auténtica tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot jamás ha podido ser comprobado pues ningún rastro arqueológico en Egipto recuerda ni vagamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Otra teoría comenta que fueron los gitanos sus creadores. Tal teoría carece de rigor histórico, puesto que es sabido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o cartas. Los gitanos no habían llegado aún a Europa en tal fecha.
Un oráculo puede delimitar múltiples cosas, la primera un templo o sitio sagrado en el que los dioses se manifiestan, la segunda la respuesta de los dioses por medio de una sacerdotisa o bien de una señal física y en tercer sitio puede tratarse del soporte a través del que se dilucida una duda.