Tarotistas y Videntes en Callús
Callús y toda la zona de Barcelona son territorios legendarios donde abundan los profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 1759 habitantes encontramos multitud de maestros en maestría del tarot y grandes eminencias de la videncia.
¿Cuales son las tarifas de un vidente y tarotista en Callús?
Los precios de estos profesionales suelen ser variadísimos, en dependencia de la experiencia aportada y de los servicios a realizar. Lo más cómodo es solicitar sus tarifas mediante email o por teléfono. Probablemente existan tarotistas que pueden ofrecer tarot online.
Además muchos de ellos ofrecen consulta para toda la zona de Catalunya.
Muchos de los tarotistas admiten no sólo servicio de tarot presencial, tambien aceptan tarot de tipo telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Barcelona y en concreto en Callús
Una baraja de Tarot se forma de un total de 78 cartas, divididas en tres grupos: 22 Misterios Mayores, 40 Misterios Menores,
dividios en 4 series de diez, los llamados palos, y dieciseis honores o bien figuras, compuestas por los Caballeros, Reyes, Pajes y Reinas de los 4 palos.
Estas tres secciones, aunque diferentes, tienen una unidad de contenido pues es posible hallar muchas relaciones simbólicas entre todas y cada una de las cartas.
Conocer el Tarot es tomar contacto con nuestro inconsciente, un mundo mágico y misterioso con el que podremos descubrir los mensajes o indicaciones que nuestra propia ánima a través del inconsciente nos quiere hacer llegar.
El Tarot se vale de un lenguaje en base a símbolos, de ahí, la trascendencia en conocer todos los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que se componga de todos y cada uno de los símbolos necesarios para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos efectuar exactamente la misma tarea que haría un analista de sueños, puesto que el proceso es muy afín, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, las analogías, correspondencias y asociaciones de ideas están contenidas en la arquitectura con la que está compuesto el juego.
Lograr ser un maestro intérprete de Tarot exige años de estudio y práctica, pero las mismas cartas se transforman con el tiempo en el profesor verdadero, puesto que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos a través de exactamente la misma práctica.
Muchas leyendas se han escuchado sobre el origen del Tarot: entre las más conocidas es su pretendido origen egipcio. Idea que surgió a partir de Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en 1.781 explicó que había tenido un sueño en el que se encontraba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. Desde ahí brotó la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio lugar a que se idease en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento actual que no guarda relación alguna con la auténtica tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot nunca ha podido ser contrastado puesto que ningún rastro arqueológico en Egipto recuerda ni vagamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Una teoría plantea que fueron los gitanos sus fundadores. Tal teoría carece de solidez histórica, dado que es conocido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o cartas. Los gitanos no habían llegado aún a Europa en dicha fecha.
Un oráculo puede delimitar varias cosas, la primera un templo o sitio sagrado en el que los dioses se manifiestan, la segunda la respuesta de los dioses mediante una sacerdotisa o de una señal física y en tercer sitio puede tratarse del soporte a través del que se dilucida una duda.