Videntes y Tarotistas en Lanaja
Lanaja y toda la zona de Huesca son sitios legendarios donde abundan los profesionales relacionados con el tarot y la videncia.
Entre sus más de 1460 ciudadanos disponemos de multitud de maestros en el arte del tarot y grandes celebridades de la videncia.
¿Cuales son las tarifas de un tarotista y/o vidente en Lanaja?
Los costos de estos profesionales acostumbran a ser variadísimos, dependiendo de la experiencia aportada y de los servicios a efectuar. Lo más habitual es solicitar sus tarifas a través de email o bien por teléfono. Probablemente existan tarotistas que pueden ofrecer tarot gratuito.
No obstante gran parte de ellos ofrecen servicio para toda la zona de Aragón.
Muchos ofertan no exclusivamente interpretación de tarot presencial, además admiten tarot de tipo telefónico.
La tradición del arte del Tarot y los Arcanos en Huesca y en concreto en Lanaja
Una baraja de Tarot se compone de un total de 78 cartas, divididas en 3 grupos: veintidos Misterios Mayores, 40 Misterios Menores,
distribuidos en cuatro series de diez, los llamados palos, y 16 honores o figuras, compuestas por los Pajes, Reinas, Reyes y Caballeros de los cuatro palos.
Estas 3 secciones, si bien distintas, poseen una unidad de contenido pues es posible encontrar muchas relaciones simbólicas entre todas las cartas.
Tomar contacto con el Tarot es conocer nuestro inconsciente, un lugar mágico y fantástico con el que podremos descubrir los mensajes o bien indicaciones que nuestra alma a través del inconsciente nos quiere hacer llegar.
El Tarot usa un lenguaje simbólico, de ahí, la relevancia en conocer cada uno de los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que se componga de todos los símbolos precisos para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos realizar exactamente la misma labor que haría un analista de sueños, ya que el proceso es muy similar, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, asociaciones de ideas, las analogías y correspondencias están contenidas en la arquitectura con la que está compuesto el juego.
Lograr ser un maestro intérprete de Tarot implica años de estudio y práctica, pero las mismas cartas se transforman con el tiempo en el maestro verdadero, ya que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos a través de exactamente la misma práctica.
Muchas leyendas se han contado acerca del origen del Tarot: entre las más extendidas es su pretendido origen egipcio. Idea que brotó a partir de Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en 1.781 explicó que había tenido un sueño en el que se encontraba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. Desde ahí surgió la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio sitio a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento actual que no tiene relación alguna con la auténtica tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot nunca ha podido ser contrastado pues ningún vestigio arqueológico en Egipto recuerda ni remotamente siquiera la posible existencia de semejante juego.
Una historia comenta que fueron los gitanos sus inventores. Tal teoría carece de rigurosidad histórica, puesto que es sabido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o bien cartas. Los gitanos no habían llegado todavía a Europa en tal data.
Un oráculo puede delimitar múltiples cosas, la primera un templo o lugar sagrado en el que los dioses se manifiestan, la segunda la respuesta de los dioses por medio de una sacerdotisa o de una señal física y en tercer sitio puede tratarse del soporte a través del que se esclarece una duda.