Videntes y Tarotistas en Lascuarre
Lascuarre así como Huesca son territorios tradicionales donde existen multitud de profesionales que practican el tarot y la videncia.
Entre sus más de 158 habitantes disponemos de multitud de expertos en la habilidad del tarot y grandes excelencias de la videncia.
¿Cuales son las tarifas de un tarotista y/o vidente en Lascuarre?
Los costos de estos profesionales acostumbran a ser muy variados, dependiendo de la experiencia aportada y de los servicios a efectuar. Lo más cómodo es pedir sus precios a través de email o por teléfono. Probablemente existan tarotistas que pueden ofrecer tarot gratuito.
Además la mayoría de ellos dan servicio para toda la zona de Aragón.
Casi todos los tarotistas ofrecen no exclusivamente servicio de tarot en persona, además aceptan tarot telefónico.
La tradición del Tarot y los Arcanos en Huesca y en concreto en Lascuarre
Una baraja de Tarot se compone de un total de 78 cartas, divididas en tres grupos: 22 Misterios Mayores, 40 Arcanos Menores,
distribuidos en 4 series de 10, los conocidos palos, y 16 honores o bien figuras, compuestas por los Caballeros, Reyes, Pajes y Reinas de los 4 palos.
Estas 3 secciones, si bien diferentes, tienen una unidad de contenido pues es posible hallar numerosas relaciones simbólicas entre todas las cartas.
Conocer el Tarot es tomar contacto con nuestro propio inconsciente, un mundo mágico y fantástico con el que vamos a poder descubrir los mensajes o indicaciones que nuestra propia alma a través del inconsciente nos quiere transmitir.
El Tarot utiliza un lenguaje simbólico, de ahí, la trascendencia en conocer cada uno de los detalles de cada carta y el requisito de contar con una baraja que se componga de todos los símbolos precisos para una adecuada interpretación.
A través del Tarot podemos efectuar la misma labor que haría un analista de sueños, puesto que el proceso es muy afín, en la base de interpretación. La ley de la sincronicidad, las analogías, correspondencias y asociaciones de ideas dentro de la estructura con la que está creado el juego.
Transformarse en un buen intérprete de Tarot exige años de estudio y práctica, pero exactamente las mismas cartas se convierten con el tiempo en el profesor verdadero, ya que desarrollan la intuición y nos enseñan sus secretos mediante exactamente la misma práctica.
Muchas fábulas se han escuchado sobre el origen del Tarot: una de las más extendidas es su pretendido origen egipcio. Idea que brotó a partir de Court de Gebelin, estudioso del Tarot, quien en 1.781 explicó que había tenido un sueño en el que se hallaba en el templo de la esfinge, en Egipto, rodeado de la cartas del Tarot pintadas en las paredes. A partir de ahí brotó la idea que tal sueño correspondía a un templo real y dio sitio a que se inventase en el siglo XIX el llamado “tarot egipcio”, invento actual que no tiene correspondencia alguna con la auténtica tradición iniciática.
El pretendido origen egipcio del Tarot nunca ha podido ser contrastado puesto que ningún rastro arqueológico en Egipto recuerda ni remotamente siquiera la posible existencia de tal juego.
Una teoría plantea que fueron los gitanos sus creadores. Tal teoría carece de rigor histórico, dado que es conocido que en siglo XIV existen ya múltiples referencias en Europa al juego de “naips” o bien cartas. Los gitanos no habían llegado aún a Europa en dicha fecha.
Un oráculo puede acotar varias cosas, la primera un templo o lugar sagrado en el cual los dioses se manifiestan, la segunda la contestación de los dioses a través de una sacerdotisa o bien de una señal física y en tercer sitio puede tratarse del soporte a través del cual se dilucida una duda.